La Mesa de Trabajo y Consenso, que nuclea a los organismos de Derechos Humanos, sobrevivientes del terrorismo de Estado y organizaciones políticas y sociales, se conformó a partir de la necesidad de recuperar el edificio y el predio donde funcionó el centro clandestino de detención para convertirlo en un lugar significativo de memoria y destinado a la promoción de los Derechos Humanos.